Una Reforma Original

Por fin esta semana he comenzado la reforma de la que tanto os he hablado, estoy realmente emocionada, ya que lo que finalmente se acaba materializando es un trabajo muy creativo y tiene muchas horas de trabajo por detrás.

Me gusta cuidar hasta el más mínimo detalle y tenerlo todo bastante previsto. Desde decisiones tan importantes como el material y formato del suelo a colocar, cómo otras más pequeñas, pero no menos importantes, sobre mobiliario y acabado final.

Con respecto a este último punto, me gusta dar un toque original y, salir en la medida de lo posible, de las tiendas de mobiliario rápido. Esta vez me he fijado en Lionshome, un portal online de productos del hogar y decoración donde se pueden encontrar piezas súper exclusivas a muy buen precio y sin salir de casa.

No obstante, todo forma parte de un proyecto muy elaborado que tiene como punto de partida una idea. Hoy aquí os voy a marcar un poco las pautas que sigo para que el resultado final sea un éxito rotundo en cuanto a diseño y funcionalidad.

La función del espacio

Es la primera pregunta que debemos hacernos a la hora de replantear el espacio, necesidades en cuanto a miembros de la familia, ocupaciones de los futuros habitantes.

Y explotación del espacio, vivienda para alquiler de larga duración, alquiler turístico o residencia propia.

Otro punto muy importante que suelo tener muy en cuenta es la capacidad que pueda tener en un futuro para adaptarse a posibles cambios funcionales sin necesidad de acometer una nueva reforma.

Además del uso de materiales, revestimientos y mobiliario de diseño que sean capaces de resistir temporada tras temporada el uso y las modas.

En este sentido me gusta encontrar piezas como estos armarios de Lionshome, de estética súper cuidada y original, además de su capacidad de polivalencia. Ya que podrán adaptarse tanto a un comedor para guardar vajilla, a un dormitorio para ropa blanca o incluso a un salón con la función en este caso de librería.

Presupuesto disponible

Es uno de los factores a los que mis clientes y yo misma suelo dar más importancia, ya que como siempre digo, en absoluto está reñido con el resultado final.

Sí soy muy partidaria de no escatimar a la hora de la elección de los materiales a usar y de la ejecución del grueso de la obra en sí. Elementos como aislamientos térmicos y acústicos que realmente no van a forma parte de lo que vemos a la hora del resultado final, sí nos van a compensar a la hora del confort y la sensación de calidez cuando comencemos a vivir esa vivienda.

En este sentido si es muy importante tener muy definidos las actuaciones a acometer. Tanto como adelantarse y prever los inconvenientes que puedan surgir durante la reforma para no desfasar demasiado el presupuesto de partida.

Con respecto al presupuesto disponible para el mobiliario,  vuelvo a mi premisa del menos es más. Una vivienda puede estar muy llena de muebles y sin embargo aportar una sensación de vacío completo.

Los gustos personales

Como os comenté al principio, la manera de acometer una reforma es un conjunto cerrado. Donde no es posible separar la fase de construcción pura y dura con la de decoración, hay que tenerlo todo previsto y consensuado para que cada una de ella trasmita nuestros gustos y esencia personal.

Siempre apuesto por invertir en una pieza, que se convertirá en el centro de cada estancia. Un hilo conductor que de sentido a una historia  y que forme un conjunto diseñado especialmente para cada familia o función del espacio a reformar.

Como por ejemplo un frigorífico de estilo vintage, un sofá de cinco plazas para ver películas acurrucados con toda la familia, una cama de estilo retro, una mesa de 12 comensales donde reunir a toda la pandilla  o una luminaria de diseño. Nuestros deseos no deben tener límites.